El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, ha anunciado este jueves un ajuste económico de US$273 millones del que ha culpado al Frente Amplio, coalición izquierdista que gobernó la nación suramericana durante quince años hasta el pasado 1 de marzo.

Lacalle Pou pretende reducir al menos en un 15% los actuales gastos de funcionamiento e inversiones del Estado, excluyendo los salarios, que se ejecutaron en los presupuestos generales del año pasado.

Con este fin, solo se repondrá una de cada tres vacantes en la administración pública, salvo en los casos de trabajadores de la salud y educación, entre otros, y se prohibirá la renovación automática de los contratos laborales en el sector público.

Además, se subirá el IVA para las compras con tarjetas de crédito y de débito.

Sin embargo, el Gobierno ha aclarado que «el precio de los combustibles no se cambiará ahora debido a la baja de los precios del barril de petróleo en los mercados internacionales en los últimos días».

Lacalle Pou ha achacado este ajuste económico a «la inacción u omisión del Gobierno anterior» del Frente Amplio, según informa el diario uruguayo ‘El País’.

El líder del Partido Nacional llegó a la Presidencia el pasado 1 de marzo, poniendo fin a tres lustros del Frente Amplio, dos con Vázquez y uno con José Mujica. El nuevo mandatario ya había avanzado cambios importantes.