El Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) aprobó 18 lineamientos para la recuperación pos-COVID-19 con transformación rural y la acción climática junto a los pueblos indígenas y afrodescendientes en América Latina y el Caribe, destacó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Los criterios fueron el resultado de 11 meses de trabajo conjunto que propuso la Comisión de Pueblos Indígenas, Afrodescendientes y Etnias del Parlatino, informó la FAO en un comunicado.

La información señaló que esta labor contó además de la FAO con el respaldo de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid) y la Cooperación Española.

Puntualizó que el documento «Lineamientos para la recuperación con transformación rural y la acción climática junto a los pueblos indígenas y afrodescendientes en América Latina y el Caribe», y aprobado recientemente, servirá como base para elaborar políticas públicas y marcos normativos más inclusivos y participativos.

La FAO puntualizó que los lineamientos abarcan temáticas como el derecho territorial, la protección de los sistemas de tenencia colectiva, el turismo rural, la medicina tradicional, la gestión autosostenible de los recursos naturales y el acceso al financiamiento.

También, mencionó, contemplan la transformación y fortalecimiento de los sistemas alimentarios indígenas para la seguridad y soberanía alimentaria, la asistencia técnica, actualizaciones legislativas y la designación de presupuestos específicos.

«Idear la recuperación y transformación del mundo rural con los pueblos indígenas y afrodescendientes representa una gran oportunidad para la búsqueda de soluciones basadas en la naturaleza, la generación de empleo verde y la protección del patrimonio cultural y ambiental de la región», comentó Gloria Sandoval , dirección de ejecución de proyectos en el exterior de la Amexcid,

Mauricio Mireles, oficial en Políticas para Pueblos Indígenas e Inclusión Social de la FAO, especificó que la población rural indígena y afrodescendiente podría representar más del 46 por ciento de la población rural de América Latina.