SELA: Funcionarios de América Latina se capacitaron en taller sobre instrumentos de política pública basados en la economía del comportamiento

El Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA), en colaboración con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ofreció el “Taller sobre instrumentos de política pública basados en la economía del comportamiento” para funcionarios públicos de la región, que tienen a cargo el diseño y ejecución de políticas en materia de salud.

Del 8 al 9 de junio, participantes de diez países, representantes de diversos ministerios; organismos multilaterales; la academia y empresas ligadas al ámbito de la salud en América Latina, se capacitaron sobre los fundamentos conceptuales y el diseño e implementación de políticas públicas sustentadas en la economía del comportamiento. La actividad fue propicia para presentar casos exitosos y realizar una práctica en la que aplicaron los cocimientos adquiridos.

Esta rama de la economía intenta incorporar ideas de otras ciencias sociales, en especial de la psicología, para enriquecer el modelo económico clásico, al tomar en cuenta el efecto que tienen las creencias, preferencias, el entorno social, las emociones, los instintos y el procesamiento de la información, en la toma de decisiones de los individuos.

Todos esos factores hacen que fenómenos tales como el exceso de confianza y optimismo, la aversión a la pérdida, el autocontrol y el sesgo del presente, den origen a errores sistemáticos que alejan a las personas de un comportamiento racional. Y es aquí donde la economía del comportamiento es clave, ya que facilita la comprensión de estos sesgos para el diseño y ejecución de mejores políticas públicas y de proyectos de desarrollo.

Durante su intervención en la inauguración del evento, el Secretario Permanente del SELA, Embajador Javier Paulinich, expresó que “alrededor del mundo, se han establecido centros de investigaciones, líneas y equipos de trabajo e instituciones cuyos objetivos se han centrado en resolver problemas de política pública empleando las herramientas de la economía del comportamiento. Abordando temas tan diversos como la educación, la salud, igualdad y equidad de género, ambiente y sostenibilidad, el ahorro o la recaudación de impuestos”.

Explicó que instituciones como el Grupo de Economía del Comportamiento del BID; la Unidad de Integración Mente, Comportamiento y Desarrollo (eMBeD) del Banco Mundial; el Behavioral Government Lab en conjunto con MineduLAB del Ministerio de Educación del Perú; el Instituto Mexicano de Economía del Comportamiento (IMEC), entre otros, “han desplegados sus esfuerzos en presentar soluciones a algunas problemáticas en nuestra región”.

La actividad también contó con la presencia de Carlos Scartacsini, líder del Grupo de Economía del Comportamiento del BID, quien afirmó que uno de los objetivos del grupo que encabeza es “aumentar el conocimiento y acercarle a la mayor cantidad de funcionarios públicos las herramientas que la economía del comportamiento ha desarrollado, porque creemos que es la manera de aumentar la efectividad y la eficiencia de las políticas públicas”.

“Como decía Richard Thaler, la vida es muy difícil, el mundo es un lugar muy difícil y tenemos que tomar muchísimas decisiones, y tenemos una capacidad limitada. Con la economía del comportamiento tratamos de hacer más sencilla esa toma de decisiones”, acotó. 

El taller de formación fue impartido por Nicolas Ajzenman, Profesor Asistente de la Sao Paulo School of Economics-FGV e investigador afiliado de IZA; Deborah Martínez, Investigadora Asociada Senior en Economía del Comportamiento en el Departamento de Investigación del BID; Ana María Rojas, Investigadora Senior en Economía Conductual en el Departamento de Investigación del BID y Lina Díaz, Consultora en Economía del Comportamiento del Departamento de Países del Grupo Andino (CAN/BID).  La moderación fue realizada por Elisabet Torres Izarra, Analista de la Dirección de Estudios y Propuestas del SELA.

En el mandato del SELA está implícito contribuir a los esfuerzos existentes en materia de difusión y formación en la economía del comportamiento para fomentar mayores habilidades en los funcionarios gubernamentales del territorio latinoamericano y caribeño, en favor de propiciar mejores resultados en la implementación de políticas públicas.