Palabras del Secretario Permanente del SELA / “Reunión de Altas Autoridades de ALC sobre políticas públicas para la atención integral de las y los jóvenes”

25 de julio al 15 de agosto de 2013

Excelentísimo Ministro, Sr. Héctor Rodríguez Castro; del Ministerio del Poder Popular para la Juventud.

 

Distinguidos delegados de los Estados Miembros de la CELAC y del SELA.

 

Señores de los medios de comunicación.

 

Señoras y señores,

 

En mi carácter de Secretario Permanente del Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA), y en nombre de nuestro Estados Miembros, me complace expresar la satisfacción de la Secretaría Permanente por haber tenido la oportunidad de, responder a la solicitud que el Ilustre Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, a través del Ministerio del Poder Popular para la Juventud, en la persona del Sr. Ministro Héctor Rodríguez Castro, nos hiciera, para hacer realidad esta Reunión de altas autoridades de América Latina y el Caribe sobre políticas públicas para la atención integral de las y los jóvenes: inclusión y equidad desde una visión transversal, a la cual, me complace darles la más calurosa bienvenida.

 

Es pertinente señalar que la participación del SELA en la organización de esta Reunión es consistente y está en línea con su política de apoyar y difundir las iniciativas y esfuerzos regionales dirigidos a impulsar la dimensión social del proceso de integración de América Latina y el Caribe en tanto que es un complemento fundamental de la dimensión económica de dicho proceso. Tal política ha estado dirigida a promover el intercambio de información, el análisis y el debate propositivo, tanto de las experiencias y buenas prácticas, así como de las lecciones aprendidas derivadas del diseño, la ejecución y la evaluación de los programas y políticas dirigidas a impulsar la dimensión social del proceso de integración en América Latina y el Caribe y el desarrollo económico con equidad social en la región.

 

Educación y sucesivamente empleo productivo son dos dimensiones primordiales de las políticas públicas para la juventud.

 

Nuestro objetivo consiste en contribuir a mantener e impulsar en la región una reflexión permanente y constructiva, idealmente consensuada y compartida por los gobiernos y demás actores involucrados, para cimentar políticas, programas y acciones que ofrezcan a las juventudes de nuestros países las oportunidades y la apropiación de las pericias necesarias para un trabajo productivo en condiciones de libertad, equidad, seguridad y dignidad.

 

Según la UNESCO, en su Informe anual correspondiente a 2012, en nuestra región existen más de 8 millones de personas con edades comprendidas entre 15 y 24 años que lamentablemente no han podido finalizar la Educación Primaria. La necesidad de trabajar por conseguir el sustento diario es el factor principal que explica la ausencia escolar, tanto en el nivel primario como en el secundario. Tal situación plantea la urgente necesidad de crear vías alternativas y efectivas que permitan transferir a los jóvenes que salen de la Escuela prematuramente, las competencias requeridas para poder tener acceso a un empleo productivo. Podemos apreciar la magnitud de tal tarea si consideramos que casi un 50% de la población total de América Latina y el Caribe tiene menos de 25 años de edad.

 

Como se desprende del informe citado, la tarea que tienen los Estados en esta materia no se limita a garantizar el acceso a la escuela. Se trata de preparar a los jóvenes mediante una formación permanente que les garantice las oportunidades de obtener un trabajo digno, que les permita participar productivamente en la construcción de ciudadanía y democracia y desarrollar sus potencialidades y vocaciones de manera plena y libre.

 

La tarea es formidable. Cabe señalar en este sentido que de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), unos 16,7 millones de jóvenes que han logrado encontrar trabajo en América Latina y el Caribe, todavía viven por debajo de la línea de pobreza, con un ingreso equivalente a apenas un dólar diario y representan el 36% de los jóvenes empleados. Más aún, uno de cada 2 desempleados en América Latina y el Caribe son jóvenes de entre 15 y 24 años.

 

En cuanto a las políticas públicas dirigidas a la Juventud en América Latina y el Caribe, es necesario destacar que los temas principales de consideración son: i) La vulnerabilidad social de los jóvenes como factor de exclusión en el acceso a las políticas públicas de Juventud; ii) La conformación de redes sustentadas en grupos juveniles; iii) La generación de espacios complementarios a los espacios educativos oficiales; iv) La capacitación técnica para facilitar la inserción y la permanencia de las y los jóvenes de escasos recursos económicos en el mercado laboral formal; v) La conformación de alianzas interinstitucionales para apoyar la estructura de gestión, garantizar la descentralización de estas actividades y la difusión de sus impactos; vi) La promoción de una cultura de paz y prevención de la violencia; VII) El fortalecimiento de valores democráticos y la participación juvenil; viii) La generación de espacios de atención integral, de estudios e investigación y de redes de conocimiento; ix) La promoción de la equidad en el acceso a las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) y de alfabetización digital y tecnológica; x) La inserción en los procesos productivos; y, en consecuencia xi) La preparación para el acceso al trabajo productivo.

 

En atención a lo antes expuesto, resulta necesario realizar el análisis de las políticas referidas a la Juventud en los países latinoamericanos y caribeños, desde una perspectiva transversal, para identificar y relevar los elementos fundamentales para la conformación de políticas para las juventudes, en atención a las particularidades de cada país, que miren y reconozcan en los jóvenes el deber y el derecho que tienen para ser tratados como sujetos activos del proceso de desarrollo y como el relevo empoderado y efectivo de la generación adulta actual.

 

De allí la pertinencia y la actualidad de esta “Reunión de altas autoridades de América Latina y el Caribe sobre políticas públicas para la atención integral de las y los jóvenes: inclusión y equidad desde una visión transversal”, la cual ha sido concebida como un espacio de convergencia para que gerentes públicos y especialistas e investigadores de reconocida contribución al tema de la Juventud puedan conocer, compartir y discutir las experiencias y los programas que se desarrollan en la región y promover así una mayor eficiencia y efectividad en el diseño, desarrollo y evaluación de los mismos, así como coadyuvar a la consolidación de una instancia latinoamericana y caribeña de intercambio y contacto permanentes entre los Ministerios e Instituciones gubernamentales de carácter nacional y regional, responsables de las políticas públicas de juventudes.