Nicaragua fortalece preparación ante desastres

09 de enero de 2015

La se centra en la promoción de una cultura de gestión integral del riesgo, enmarcada en la protección, el cuidado y la seguridad de la persona, la familia y la comunidad.

Publicado por la Agencia Prensa Latina, vía Google Noticias

Managua, 9 de enero de 2015 (PL).- El Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred) continúa hoy implementando iniciativas para fortalecer la capacidad de respuesta del pueblo nicaragüense ante fenómenos naturales y emergencias.

Como tal propósito, dicho organismo anunció la implementación de un plan que se centra en la capacitación de los ciudadanos y la mejora de las condiciones de vida de la población más vulnerable.

Dicha estrategia se centra en "la promoción de una cultura de gestión integral del riesgo, enmarcada en la protección, el cuidado y la seguridad de la persona, la familia y la comunidad", afirmó la entidad.

Además de contemplar la aplicación de medidas preventivas, plantea la necesidad de fortalecer los sistemas de alerta temprana y la importancia de los planes de recuperación, una vez ocurridos los desastres.

Durante el 2014, Nicaragua se enfrentó a amenazas climáticas como fuertes lluvias y movimientos telúricos superiores, en algunos casos, a los seis grados de magnitud en la escala de Richter.

En abril pasado, un temblor de 6,2 grados, con epicentro cerca del volcán Momotombo y a 10 kilómetros de profundidad, sacudió la capital y otras ciudades de la región del Pacífico nicaragüense.

Dicho evento tuvo más de mil réplicas durante las 24 horas siguientes al momento en que ocurrió y causó la muerte de una persona, heridas a 266 y daños a más de dos mil 354 viviendas.

Seis meses después, un terremoto de 7,3 grados con epicentro frente al golfo de Fonseca provocó afectaciones a 700 ciudadanos y 68 hogares.

Por otra parte, intensas precipitaciones registradas en octubre causaron la muerte de 33 personas y daños a más de 63 mil.

Cerca de siete mil viviendas fueron perjudicadas y más de mil 500 familias tuvieron que ser albergadas, para lo cual la dirección del país habilitó decenas de locales.