El Banco Central de Colombia redujo el martes su tasa de interés en 25 puntos base a un nuevo mínimo de 2,50%, para reducir los costos de financiamiento en el país y anticiparse a una esperada recesión económica, al tiempo que adoptó medidas para reforzar el suministro de liquidez.

La decisión contó con el voto de cinco de los siete miembros del directorio del organismo, mientras los dos restantes se inclinaron por reducirla en medio punto porcentual.

Se trata del cuarto mes consecutivo en el que la autoridad monetaria baja el costo del dinero -para un total de 175 puntos base-, como reacción al efecto de la pandemia de coronavirus sobre la cuarta economía de América Latina que comenzó el 25 de marzo un periodo de aislamiento preventivo que se prevé finalizará el próximo 15 de julio.

En un reciente sondeo de Reuters, 12 de los 20 analistas anticiparon la magnitud del recorte del tipo referencial, en tanto que los 8 restantes esperaban una baja de 50 puntos básicos.

«Las revisiones a la baja del crecimiento local y global sugieren una ampliación sustancial de los excesos de capacidad productiva y mayor deterioro del mercado laboral, frente al mes anterior», dijo el gerente del banco, Juan José Echavarría, en una conferencia virtual.

«La incertidumbre es enorme, es un tema de cada junta, pero lo importante es que hubo un cambio de ritmo (en los recortes) y que, por supuesto en algún momento habrá que parar, pero veremos cuándo toca hacerlo, eso lo irá determinando la economía», explicó.

El descenso de la tasa de interés se da en medio de una inflación anual que a mayo se ubicó en un 2,85%, con lo que la tasa real se sitúa en terreno negativo.

Echavarría anticipó que en julio se conocerán los nuevos pronósticos de crecimiento económico de la entidad, pero advirtió que «es muy posible que las proyecciones sean más malas de lo que ya habíamos dicho».

Hasta ahora el equipo técnico del banco estima que la economía colombiana se contraerá entre un 2% y 7%.

Las medidas que adoptó el Gobierno para tratar de contener la propagación del COVID-19 provocaron una semiparálisis de la actividad económica que llevaría al país a una contracción de 5,5% este año, según el Ministerio de Hacienda.

En tanto, el organismo emisor adoptó medidas adicionales para reforzar el suministro adecuado de liquidez a la economía y apoyar la provisión de crédito que requieren las empresas y los hogares.

El banco realizará operaciones de expansión conocidas como «repos» para prestar al sistema financiero a un año y nueve meses con garantía de títulos de deuda pública, mientras en moneda extranjera continuará ofreciendo durante julio a través de subastas contratos forward.