París, 1 de julio de 2014.- «Nuestros costos logísticos no se deben solo a que muchos de los países de la región están más lejos de los centros de consumo. Se encarecen por las enormes deficiencias actuales de las infraestructuras de transporte», señaló en París en la apertura del Foro Económico Internacional de América Latina y el Caribe, el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.

El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, aseguró que el desarrollo económico de Latinoamérica está vinculado de forma directa a la mejora de las infraestructuras.

«Nuestros costos logísticos no se deben solo a que muchos de los países de la región están más lejos de los centros de consumo. Se encarecen por las enormes deficiencias actuales de las infraestructuras de transporte», señaló en París en la apertura del Foro Económico Internacional de América Latina y el Caribe.

El representante del BID recordó que esos costes suponen entre el 18% y el 35% del valor de los productos, cifra que en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se rebaja al 8 por ciento.

«Para poder cerrar la brecha que nos separa de las regiones más dinámicas tendríamos que duplicar o triplicar la inversión en infraestructuras por lo menos durante dos décadas. Hablamos de invertir anualmente casi el 6% del PIB, pero los beneficios de ganar eficiencia también serían formidables», destacó.

Si la región consiguiera poner sus infraestructuras al nivel país latinoamericano mejor posicionado, según Moreno, la tasa de crecimiento podría aumentar casi en 2,6 puntos y se acercaría en conjunto al 4,5% y «casi a tasas chinas» en algunos de sus países.

«Para concretar los planes se requiere no solo vocación de integración, sino decisión política sostenida. Si queremos un desarrollo económico más dinámico y propiciar una mayor integración, debemos invertir más en infraestructura. Llevarla adonde hace falta y modernizarla donde empieza a resultar obsoleta».

Y en ese camino se apuesta por el apoyo y la participación de Europa: «Necesitamos no solo recursos financieros, sino la capacidad técnica y profesional de sus empresas», añadió Moreno, según el cual se deben igualmente perfeccionar «los esquemas de las asociaciones público-privadas».

Para la secretaria general de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), Rebeca Grynspan, todavía está por ver el alcance que pueden jugar los países europeos en esas demandas, pero no hay duda del regazo en infraestructura, «tanto en calidad como en monto».

Latinoamérica, en su opinión, ha cumplido ya sus deberes a «nivel macroeconómico» y le falta alcanzar sus objetivos a nivel micro, pero hay que recordar, pese a todo, que no atraviesa en estos momentos una «debacle económica, sino una desaceleración».