La desigualdad es un fuerte obstáculo para el desarrollo de América Latina

17 de julio de 2014
Fuente: Publicado por Vanguardia.com.mx, México
Ciudad de México, 17 de julio de 2014.- Hugo Beteta director de la Sede Subregional en México de la CEPAL, sostuvo que para esta Comisión, en México se da un renacimiento de la planeación del desarrollo regional, en el marco de lo cual el organismo plantea enfrentar la desigualdad a través de enfoques sistémicos y multidisciplinarios que permitan dar cuenta de la complejidad de los tejidos sociales y económicos.

"Para la CEPAL, enfrentar las desigualdades sociales requiere de un Estado Nacional con capacidades para actuar no sólo como promotor activo y directo de los planes y políticas de desarrollo, sino también como ente articulador y promotor de diálogos entre las diferentes escalas de gobierno y distintos actores", insistió en el marco de la inauguración de la Reunión Intermedia Anual de la Red Latinoamericana de Políticas Públicas de Desarrollo Regional.

En el acto encabezado por el titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y a donde asistieron los gobernadores de Durango, Jorge Herrera Caldera y de Tabasco, Arturo Núñez, Hugo Beteta sostuvo que las desigualdades sociales no son por un tanto un problema de responsabilidad al municipio, estado o federación, sino un problema de la nación como un todo.

"Proponemos la convergencia entre el ahorro y la inversión, reducir las brechas de productividad entre grandes y pequeñas empresas y entre territorios, corregir las disparidades de ingresos, abatir la desigualdad de genero raza e idioma", destacó.

Durante la inauguración, donde también se hizo la presentación de la política nacional de desarrollo regional del gobierno de México y sus instrumentos, los dos gobernadores, representantes de organismos internacionales como Beteta y María Eugenia Garduño, directora de la OCDE en México para América Latina y el titular de la Sedatu, Jorge Carlos Ramírez Marín, coincidieron en trabajar para favorecer a los más pobres, evitar asentamientos irregulares, impulsar el crecimiento económico y la inversión a través del desarrollo regional.

María Eugenia Garduño, dijo que desde la OCDE se considera que aún "sigue siendo considerable" la desigualdad en México a pesar de la reducción que se ha dado del fenómeno. De aquí el reto de desarrollar políticas públicas, ante la coincidencia que existe de las disparidades que hay, por lo que es fundamental en regiones, familias e individuos esas políticas con un enfoque integral, multidimensional y multidisciplinario.

Ramírez Marín, subrayó en este marco la urgencia de evitar asentamientos humanos a través de modelos regionales de políticas públicas en materia de desarrollo urbano en el sur-sureste de la República, pues de no hacerlo la pobreza crecerá en los nueve estados de esa zona del país, obligando a la población de escasos recursos económicos a emigrar al centro y norte.

"Encontremos la respuesta de por qué los principales asentamientos irregulares en Tamaulipas no son de gente del norte, sino son de gente que viene de Veracruz e incluso de Campeche".

Puso como ejemplo que los principales asentamientos irregulares en Tamaulipas, que aclaró, no son de personas originarias de ese estado, sino de gente de estados como Veracruz o Campeche, por lo que señaló que la planeación regional es la instancia en la cual se puede definir el futuro del país.

En el encuentro donde estuvo Stephan Vavrik, embajador alterno de la Unión Europea en México, Ramírez Marín reiteró que es necesario hacer compatible el crecimiento económico con la disminución de la desigualdad, para lo cual es necesario escuchar primero a cada una de las regiones de la República.

Por ello, dijo, el Presidente Enrique Peña Nieto ha articulado un ambicioso programa para democratizar la productividad, es decir, disminuir la desigualdad a través del mejor aprovechamiento del esfuerzo y talento de los mexicanos.

"Nuestra propuesta en esta reunión es un desarrollo regional fundado en poner sobre un mismo piso las reglas para el desarrollo económico a lo largo del territorio, y alentar procesos participativos de toma de decisiones para generar modelos de desarrollo endógeno. Al igual que una casa, empezamos construyendo desde abajo".

El gobernador de Tabasco, Arturo Núñez, expuso que nunca una región podrá desarrollarse a partir de la yuxta posición de enfoques sectoriales en donde uno pretenda ser siempre el referente de todos los demás y liderearlo, cuando lo que se necesita es una lógica integral de carácter regional.

Detalló que en ese sentido "estamos trabajando en la comisión para el desarrollo integral de la región sur sureste del país, que comprende nueve entidades federativa, Puebla, Veracruz, Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Guerrero, Oaxaca y Chiapas".

Con esa premisa, durante el acto se firmó un convenio de colaboración entre la SEDATU, representada por el secretario Jorge Carlos Ramírez Marín y la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), representada por el gobernador de Durango y coordinador de la Comisión de Desarrollo Regional, Jorge Herrera Caldera, para la instrumentación de los programas regionales Norte, Centro y Sur-Sureste.