Quito, 9 de julio de 2014 (PL).- Ecuador y San Vicente y las Granadinas acordaron fortalecer la cooperación bilateral, como parte de los esfuerzos integracionistas que desarrollan ambos gobiernos en el contexto latinoamericano y caribeño.
Según señaló el presidente Rafael Correa tras reunirse ayer martes aquí con el primer ministro Ralph Gonsalves, el país suramericano construirá cuatro puentes destruidos por un huracán que asoló el año pasado a la pequeña isla caribeña, la que, a su vez, ayudará a capacitar profesores ecuatorianos en el idioma inglés.
Esta visita sella nuestro compromiso de avanzar en la construcción de la Patria Grande latinoamericana, aseveró el mandatario ecuatoriano, quien esta noche condecorará a su huésped con la Orden Nacional al Mérito en el grado de Gran Collar.
Tras comentar que Suramérica ha estado muy alejada de esas pequeñas islas en términos de cooperación, Correa recalcó el interés de su gobierno en iniciar negociaciones para firmar un acuerdo comercial con la Comunidad del Caribe (CARICOM).
Estamos seguros que estos lazos se extenderá también a la Asociación de Estados del Caribe y a la Organización de Estados del Caribe Oriental, agregó el jefe de Estado, quien explicó que Ecuador aboga por una cooperación sur-sur, solidaria y sin condicionamientos.
Gonsalves, por su parte, destacó que ambas naciones comparten también muchos puntos en común en temas de política internacional, sobre todo en lo que respecta a la necesidad de reformar Naciones Unidas y el Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
Tenemos que asegurar que los derechos humanos sean definidos de forma más holística, y no que reflejen solamente un concepto neoliberal, apuntó el líder caribeño.
Recordó además que tanto Ecuador como San Vicente y las Granadinas han denunciado el espionaje estadounidense, una actividad que, dijo, los pueblos civilizados no podemos permitir.
De acuerdo con Gonsalves, su país encabeza también el reclamo de la CARICOM a las antiguas metrópolis de Francia, Reino Unido, Holanda y España por el genocidio de la población autóctona, y los daños causados por la esclavitud.
Es un legado que se traduce hoy en subdesarrollo, dificultades y privaciones materiales, por lo que necesitamos trabajar juntos para reparar los daños de este genocidio, sentenció.